Este es el título del libro de André Stern en el que
aboga por una educación basada en la confianza en las personas. Nos cuenta su
experiencia sin currículos, sin exámenes, sin horarios…Es músico, compositor,
lutier, periodista y asesor educativo. No se si su experiencia es única y no
exportable, no generalizable, pero está apoyada en argumentos que comparto .
Transcribo aquí algunas de sus opiniones que me han
interesado. Unas, me han reafirmado, otras, me han convencido y otras, me
gustaría confrontarlas, quizás por el ¿exceso? De realismo que dan tantos años
de profesión. Aquí las dejo por si a alguien le interesan y le ayudan a pensar
y a repensar su tarea como padre y/o maestro.
-TODOS tenemos una inclinación natural y espontánea
al aprendizaje expresada a través de la curiosidad, voluntad de exploración, de
experimentación…
- LA ESCUELA le pide que deje de jugar para aprender
cuando en su cabeza van juntos juego, vida y aprendizaje ( incluso cuando está
enfermo)
- EL JUEGO ha
de ser espontáneo y por eso, las actividades dirigidas no cubren sus
necesidades ( cada vez somo más aficionados a este tipo de actividades
dirigidas constantes , para que “no se aburra” y lo que conseguimos en la
mayoría de los casos consumidores voraces
de actividades …..) Estamos siempre “entreteniéndolos”
-EL ENTUSIASMO. Nuestro cerebro se desarrolla
exclusivamente ahí donde lo utilizamos con más entusiasmo. En el cerebro de un
niño de dos años se observa una tempestad de entusiasmo cada tres minutos. En
el de un adulto, apenas TRES AL AÑO…. Para mí, lo primero es el entusiamo, la
pasión. Lo demás, viene solo.
APRENDÍ con otros, pero más que enseñarme su
profesión, me la mostraron
¿Quizás, así mejorarían un poco los resultados del
PISA financiero, que en estos días nos arroja un porcentaje muy alto de alumnos
españoles que no saben interpretar una factura? Seguro que, además hay otros
medios para conseguirlo, pero cualquiera que quiera conseguir unos resultados
profundos y auténticos no pueden obviar
el ENTUSIAMO y la pasión por lo que hacemos
"Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano. Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos Órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común" Los caminos de viento - Eduardo Galeano.
Excelente artículo escrito por Concejo Educativo sobre la LOMCE. Está claro que este señor no cree en la propuesta de las inteligencias múltiples. Yo creo que se la sabe, que se la ha leído, que no es que no sepa la diferencia que existe entre talento e inteligencia, entre equidad y desigualdad , entre lo público y lo privado, sino que su intención era y es hacer una ley profundamente ideológica. Para eso utiliza todo esto de "los talentos". Es la misma diferencia que hay entre una evaluación que sirva para clasificar en vez de para detectar dificultades y proponer soluciones para poder MEJORAR. Se le ve el plumero señor Wert y este artículo le deja "con el culo a las canales" ( expresión que se utiliza en mi pueblo para manifestar que te han descubierto o te han dejado al descubierto)
Si tan preocupado está por mejorar la calidad educativa, es extraño que la profesión docente, sólo aparezca de modo marginal en
la propuesta para el anteproyecto cuando el informe McKinsey, citado por el Ministerio y la mejor literatura sobre
cambio, reforma e innovación en la enseñanza, han repetido hasta la saciedad
que un sistema de calidad depende de un profesorado de calidad: bien formado,
reconocido socialmente, con unasituación
laboral digna y correspondiente a su papel clave en el desarrollo de
nuestras sociedades, responsable, motivado y con una carrera profesional clara. Queda pues al descubierto el objetivo verdadero de esta reforma preocupada y centrada en el mercantilismo, la segregación y el desprecio por el sistema público (Angulo)
El Ministro de Educación, Jose Ignacio Wert, ha conseguido, contra
viento y marea y con la oposición de toda la comunidad educativa, llevar
a trámite parlamentario su reforma educativa, que él ha denominado
eufemísticamente “ley orgánica de mejora de la calidad educativa”
(LOMCE). Y digo eufemísticamente, porque es un proyecto de ley que, en
clara contradicción con el título que proclama, es una reforma
profundamente clasista y segregadora. Bajo el paraguas de la existencia
de diferentes “talentos” en el alumnado, lo que se pretende realmente,
mediante vías paralelas e itinerarios, es romper el actual tronco común
en la escolaridad básica y común, desviando y segregando al alumnado con
mayores dificultades hacía vías devaluadas e itinerarios segregadores
según el “grado de talento” que alguien determine en un momento dado que
un niño o una niña posee.
El término “talento”, infrecuente en la literatura pedagógica
contemporánea, es un vocablo recuperado de la terminología bíblica para
utilizarlo en esta Ley. Se orienta en un sentido innato y selectivo, que
es contrario al principio y la orientación básica de la pedagogía y la
psicología actual: toda persona tiene capacidad y deseo de aprender a lo
largo de toda la vida, lo que falla es la capacidad para saber motivar y
entusiasmar a las personas en el proceso de aprendizaje. Sin embargo,
en contra de toda evidencia científica, Mr. Wert, en el preámbulo de su
proyecto de ley, afirma que “todos los estudiantes poseen talento, pero
la naturaleza de este talento difiere entre ellos, por lo que el sistema
educativo debe contar con los mecanismos necesarios para desarrollar
una estructura educativa que contemple diferentes trayectorias. La
lógica de la reforma se basa en la evolución hacia un sistema capaz de
canalizar a los estudiantes hacia las trayectorias más adecuadas a sus
capacidades”.
Lo primero que habría que preguntarse es quién va a determinar el
supuesto grado de talento que tiene un niño o niña y en función de qué
criterios y parámetros. Con qué pruebas. En qué momento de su evolución y
desarrollo. De hecho, la mayoría de expertos y expertas plantean que,
en caso de poder diseñar ese tipo de pruebas que “midan” el talento,
este modelo supondría una vuelta al denostado constructo de “coeficiente
intelectual”, que ya la ciencia ha demostrado reiteradamente su
inadecuación para captar la naturaleza cualitativa, multidimensional, en
permanente desarrollo y no mensurable de la inteligencia humana. Además
de que hace tiempo ya se han cuestionado las pruebas que se aplicaban
para medirlo, pues suponen una visión cargada de prejuicios y
distorsionada, que tiende a reflejar la cultura y las prioridades de la
persona que las diseñó.
Es un profundo error científico seguir creyendo en el siglo XXI que se
nace con talento o no, o unos con un talento muy reducido y otros con un
talento extraordinario, o que unas personas tienen talento para llegar
al nivel de educación obligatoria y otras personas tienen talento para
seguir estudiando hasta el nivel universitario, o que algunas tienen
talento sólo para trabajar en lo manual y otras tienen talento para
dedicarse a labores intelectuales. Incluso, aunque así fuera, está
sobradamente demostrado que es un prejuicio ideológico, marcado por una
concepción clasista y segregadora, concebir que la educación no puede
potenciar, modificar o desarrollar las capacidades o “talentos” de las
personas. Considerar que la educación se debe reducir a “descubrir” el
supuesto talento de cada persona y dedicarse a “clasificarlas” y colocar
a cada quien en el carril correspondiente al talento que le ha tocado,
es un claro prejuicio acientífico marcado por una ideología
profundamente clasista. Porque detrás de esta búsqueda, etiquetamiento y
clasificación de los supuestos “talentos diversos” lo que hay es una
clara intención de colocar a unos en el carril de los estudios de
excelencia y otros en el carril de la formación para el trabajo.
Este prejuicio sin fundamento es el que ha asentado, hasta épocas
recientes, que a las personas con diversidad psíquica o funcional no se
las educaba, porque se consideraba que era un esfuerzo inútil y un
despilfarro de recursos, pues no tenían “talentos aprovechables”. No
podemos volver a prejuicios ya superados sobre el modelo de los
supuestos “talentos”, que considera la inteligencia como algo innato e
inamovible y que afirma, en contra de la investigación y la experiencia
en este campo profesional, que lo adecuado es clasificar a las personas
para dar a cada una una vía diferente según el juicio que alguien
determina en edades tempranas de los niños y niñas. Esto fue lo que
llevó a determinar a temprana edad que Albert Einstein no tenía talento y
era un fracaso escolar.
Ya hace más de dos décadas, Howard Gardner cambió la psicología con su
teoría de las inteligencias múltiples, afirmando que todos las personas
tienen la capacidad de aprendizaje y de desarrollo potencial de su
inteligencia, y que ésta no es algo unitario e inamovible, sino que es
vista como un conjunto de inteligencias múltiples, distintas e
independientes, para resolver problemas y/o elaborar productos que sean
valiosos en una o más culturas. Las personas aprenden, representan y
utilizan el saber de muchos y diferentes modos. Lo mejor que tiene la
propuesta de las inteligencias múltiples es que demuestra que todos y
todas podemos y debemos desarrollar todas nuestras inteligencias puesto
que todos poseemos, en mayor o menor medida, todas las inteligencias. Lo
que la escuela debe contribuir, por tanto, es a desarrollar la
capacidad de entusiasmar a todos los jóvenes por el aprendizaje,
proponiéndoles actividades y experiencias motivadoras y unos contenidos
apasionantes que les adentren en la aventura emocionante de comprender
la realidad y descubrir el saber. Esto sólo es posible a través de un
proceso de aprendizaje motivador que facilite realmente que todos los
jóvenes puedan desarrollar todas sus inteligencias múltiples y diversas
hasta el máximo de sus potencialidades.
El talento de Mr. Wert lo que pretende, en definitiva, es excluir a una
determinada parte de la población que ha sido incluida en el sistema
educativo en los últimos treinta años. Para esto sí que tiene talento
Mr. Wert. Para vendernos la segregación por “talentos”, utilizando algo
fundamental en el campo educativo como es la atención a la diversidad.
Por eso debemos decirle muy claramente al Ministro de Educación que
atención a la diversidad, sí; segregación por “talentos”, no.
Interesantísima entrevista a Ken Robinson. Verdades como puños que a algunos les seguirá sonando raro, raro.
LA EDUCACIÓN DEBERÍA AYUDARNOS A TODOS A ENCONTRAR NUESTRA INTELIGENCIA Y NO LIMITARSE A ENCAUZARNOS HACIA EL MISMO TIPO DE TALENTO
Ahí es nada. ¿ Hacemos la prueba del algodón? Coge tu libro de texto después de leer la entrevista y serás totalmente consciente de lo que promueve o fomenta...Si no estás de acuerdo con ello, actúa en consecuencia. Y eso no quiere decir que no utilicemos los libros de texto. Utilizado como recurso al servicio de lo que tú pretendes, es útil...No dejéis de leerlo.
No hay grandes comentarios que hacer, ni análisis, ni reflexiones, ni. nada que no sea ASOMBRARSE , FELICITARSE, SONREIRSE, BESARSE, DISFRUTARSE .... me parecen increíbles estos 22 años. Toda una mujer
Quiero compartir esta entrada del blog de Miguel Ángel Santos Guerra. Parte de un mensaje desgarrador de una madre ( que puede ser cualquiera de cualquiera de los alumnos que tenemos) y pasa a reflexionar y a proponer acciones, cambios, que no por sabidos y repetidos dejan de ser ciertos. Yo, al menos no me canso de repetirlos. Eso sí, responde a una pregunta que yo llevo haciéndome hace ya unos años: ¿ Cómo es posible que haya tantos niños hiperactivos, diagnosticados, medicados.... cuando yo solo veo niñ@s inquiet@s, curiosos, que no se adapatn al sistema.....? Me da la respuesta. No es que el alumnado sea hiperactivo sino que la escuela es hipoactiva. No dejéis de leerlo
Quiero políticos de VERDAD que acompañen a jueces, maestros, médicos, enfermeros, policías y un largo etc, en su lucha para que los nadie se conviertan en ALGUIEN. ¡YA!!!!! En una sociedad en la que algunos se enriquecen a costa de los demás, es una auténtica vergüenza que sigan existiendo los NADIE
"Los nadies", de Eduardo Galeano (1940)
"Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los na-
dies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de pronto
la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la
buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni nunca, ni en
lloviznita cae del cielo la buena suerte, por mucho que los na-
dies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o se le-
vanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando de
escoba.
Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada.
Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la
Liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos:
Que no son, aunque sean.
Que no hablan idiomas, sino dialectos.
Que no hacen arte, sino artesanía.
Que no practican cultura, sino folklore.
Que no son seres humanos, sino recursos humanos.
Que no tienen cara, sino brazos.
Que no tienen nombre, sino número.
Que no figuran en la historia universal, sino en la crónica roja de la prensa local.
Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata."
Para todos mis amigos.... visto con el humor
de Erlich. QUE NO NOS FALTE EL OPTIMISMO, sí, pero que tampoco nos
falten las ganas de lucha para reivindicar la solidaridad y no la
caridad, para reivindicar la equidad, la justicia social, la dignidad
de las personas, el interés y la mejora del colectivo... Que ese
optimismo se transforme en fuerza vital, para que como decía Benedetti, "me sienta sereno en mi confianza confiando en que una tarde te acerques y te mires, te mires al mirarme." FELIZ 2013 PARA TOD@S VOSOTR@S
Yo vengo sin idiomas desde mi soledad, y sin idiomas voy hacia la tuya (García Montero)
Desde hace unos días las hadas y los elfos del reino de la casualidad (yo no creo mucho en el destino) se han empeñado en que relea un artículo, unas reflexiones de Ángeles Caso. Primero, fue una preciosa entrevista que hizo mi amiga Nieves Moreno a la autora de dicho artículo; después fue un email de un amigo que contenía el artículo mencionado y publicado en La Vanguardia y por último, la más dramática de todas ellas: la muerte de un hombre cercano y apreciado por mí y por mi familia y al que tal y como dice Ángeles “ echaré de menos porque tuve la suerte de haberle tenido a mi lado”. Todas esas ¿casualidades? se unen a las preguntas, a las indecisiones, a los sufrimientos, a las alegrías, a los propósitos que me hago… y se ven reflejadas en los sentimientos tan maravillosamente expresados por Ángeles.
“A estas alturas de mi existencia, he vivido ya las suficientes horas buenas y horas malas como para empezar a colocar las cosas en su sitio.”
Cómo coloco yo las cosas en su sitio??? Cómo recuperar tantas energías gastadas en conflictos, personas , objetivos, que no lo merecían? Cómo colocar en su sitio a lo que realmente es y ha sido importante en mi vida? Cómo hacer para que todos los momentos vividos al lado de las personas que te importan y a la que importas ( por eso son importantes) puedan ser recuperados o saboreados? ¿ Cómo ir sin idiomas mediatizados, sin prejuicios, sin miserias? ¿ Cómo hacer que no me duelan esos malditos indiferentes que no se meten en líos? O mejor aún ¿ Cómo podría hacer yo que estos indiferentes dejen de serlo y se metan en el lío de luchar por una sociedad más justa? Cómo hacer para no estar de vuelta de nada, para que el oficio no haga callo?
Te doy las gracias Ángeles por tu artículo, doy las gracias a los elfos y a las hadas del reino de la casualidad por permitir que todo esto haya coincidido . Esta Navidad voy a intentar poner las cosas en su sitio. Voy a intentar valorar y responder a esos CÓMOS. Y eso, amig@s es lo que yo os deseo para esta Navidad y para el próximo año, que intentéis colocar las cosas en su sitio:
QUE creáis que es más importante sentir, pensar y ser que tener y exhibir
QUE mantengáis la libertad y el espíritu crítico aunque haya que pagar un precio
QUE tengáis toda la serenidad para sobrellevar el dolor y toda la alegría para disfrutar de lo bueno
QUE tengáis un instante de belleza a diario.
QUE sigáis llorando cada vez que algo lo merezca, pero no os quejéis de ninguna tontería……
Todo eso os deseo y os lo deseo a sabiendas que, como dice García Montero, “Han pasado los vientos y no es sencillo mirarse a los ojos...”
Os adjunto el enlace al artículo http://www.lavanguardia.com/magazine/20120119/54245109494/lo-que-quiero-ahora-angeles-caso.html
Si dicen caíste yo digo
me levanto Si dicen dormido es mejor soñando Si dicen caíste yo digo me levanto Si dicen dormido es mejor soñando Hoy sabemos que lo importante es soñar
Me ha gustado leer esta entrevista que realizan en ABC a Cecilia Christiansen ( MEJOR PROFESORA DE MATEMÁTICAS en 2011). La verdad es que no tenía ni idea que existía un país en el que otorgaban este reconocimiento. Aunque no sé muy bien con qué criterios y con qué trabajo lo conceden, solo puedo decir que estoy MUY, MUY DE ACUERDO con el pensamiento de esta profesora. No es porque descubra nada nuevo, nada que no hayamos ya defendido desde las visiones más progresistas sobre la educación ( LOGSE, Movimientos de Renovación Pedagógica...), en qué consiste el nivel, la enseñanza, la capacidad, la competencia...., sino porque me resulta curioso coincidir en lo fundamental y me alegra que lo defienda alguien que posee un reconocimiento de esa índole al pensar que, quizás, convenza a más profesorado de Secundaria, que si esto mismo lo dicen las leyes de educación. las federaciones de padres y madres, los partidos políticos, la inspección , etc. Quizás, en boca de esta profesora, es más fácil entender que los chicos y las chicas llegan al mismo entendimiento pero por caminos distintos, o que el problema es que no se enseña al alumno a pensar, sino que los libros de texto lo llevan a través de fotos y dibujos con poco texto a rellenar, copiar.....Se hace mucho entendiendo poco y la Matemática es una gran arma para enseñar a pensar.
Quizás tampoco sea demasiado difícil coincidir con ella en que para que una escuela sea de calidad, necesitamos urgentemente un sistema distinto para la formación y elección del profesorado. No podemos tener una escuela de calidad sin profesores profesionales pero con vocación sin profesores que se apasionen con lo que hacen, que se emocionen al ver la mirada de un alumno cuando aprende, cuando descubre, con profesores y con una Administración que no solo se guíen por intentar mejorar los resultados de PISA, ya que PISA no mide aspectos tan importantes como la capacidad colaborativa, ni la capacidad de hacer un razonamiento, por ejemplo.
Hay algunas ideas que desgrana en la entrevista con las que no estoy de acuerdo, pero destaco las que comparto.
Os dejo aquí el enlace a la entrevista del día 2 de noviembre de 2012
Ya en su día cuando vi esta película, padecí ciertos sentimientos confusos. Notaba que había aspectos, detalles, denuncias, propuestas que me agradaban, que compartía , pero no me sentía satisfecho. Barruntaba ( como decían mis abuelos utilizando un verbo precioso y ya en desuso) algo confuso, algo que no dejaba posicionarme a favor de la película... Hoy, la lectura de este análisis, de Fernández Enguita en la tribuna de El País, me quita confusión y da la razón a mi intuición, de la que, por otra parte, hago caso CASI SIEMPRE. La transcribo tal cual está.
La educación banalizada
¿Quién
puede estar satisfecho con el estado de la educación? No vivimos una
catástrofe, pues el acceso se ha expandido, los medios se han multiplicado, el
conocimiento alcanza cuotas antes inimaginables, etcétera, pero la mayoría de
países están descontentos con sus resultados, las desigualdades se eternizan,
la presión sobre la adolescencia se torna excesiva, el malestar docente crece,
la institución pierde pie ante los nuevos medios y políticas y proyectos no dan
los resultados apetecidos.
Ese es el panorama en que apareceLa educación prohibida,un documental que critica el actual
modelo escolar, sugiere algunas alternativas y lo envuelve todo en una confusa
cháchara de la que es difícil sacar algo en claro. Vale recordar que la
escolarización universal ha tenido por función formar súbditos y asalariados,
pero no se debería olvidar que también ha contribuido a la ciudadanía política
y social, es excesivo vincularla al nazismo y no cabe ignorar lo que debe a la
demanda popular y al expansionismo profesional.
A esa escuela ya anacrónica opone el
documental, en el filo entre el reformismo pedagógico y la desescolarización,
experiencias que asoman superficialmente a la pantalla o se presumen en la base
de un alud de mensajes de maestros, pedagogos y publicistas varios. El resumen
es que los niños se desarrollan mejor solos, sin que nadie pretenda dirigirlos,
idea expresada en las manidas metáforas de la planta, el árbol o el bosque a
las que ahora se suman la célula: todo lo que el niño necesita para aprender lo
tiene dentro, repite la enésima versión de esa letanía inmanentista que desde
la mayeútica de Platón, pasando por la educación negativa de Rousseau, llega
hasta cierta manera actual de entender el aprendizaje activo o el
constructivismo. Quienes creían que naturaleza y cultura funcionan de manera opuesta
se equivocan: dejen crecer libremente al niño, que no será Kaspar Hauser sino
Einstein.
Amenizado con una inverosímil y cursi
dramatización con adolescentes, el grueso documental se centra siempre en la
educación infantil, que impregna todo el argumento con su aroma. Por ahí entra
más fácilmente el empalagoso desfile de todos los buenismos: amor, diálogo,
mirada, alegría, armonía, cooperación, gozo... Ahí cabe invocar a Montessori,
Steiner o Freire, pero a su rebufo se cuelan Gatto, Krishnamurti y, peor, un
popurrí de sistémicos, holísticos, predicadores zen, maestros espirituales,
obradores de milagros...
He de confesar que me dormí viendo el
documental y tuve que rebobinarlo. Lo que ocupa dos horas y media cabría en
una, y la parte que vale la pena en menos. Pero, más que el contenido, lo
realmente intrigante es por qué se ha difundido así. Por un lado, desde luego,
revela el desconcierto y el descontento reinantes en la educación y la avidez
con que educadores y otros buscamos respuestas. Por otro, sin embargo, temo que
refleje una preocupante tendencia a la trivialización del debate y la búsqueda
de soluciones sencillas y mágicas. En el último decenio no podría citar un
libro o artículo que haya suscitado una atención generalizada en este ámbito. La
escuela pertenece a la era Gutenberg, pero los profesores parecen más atentos
al audiovisual. No imagino un congreso de economistas, por ejemplo, proyectando
Wall Street o Inside job, dos magníficos filmes, pero decenas de encuentros de
educadores lo han hecho con La lengua de las mariposas, Todo empieza hoy, La
ola o La clase. Y estas, aunque algo inclinadas a complacer a su público, eran,
al fin y al cabo, buenas películas; no querría ver a la profesión reunida en
torno al artificiosoLa educación
prohibidao a la
insufribleKatmandú.
Mariano Fernández Enguitaes catedrático de Sociologia en la
Universidad Complutense.www.enguita.info
Lo peor de esto es que de vez en cuando te puedes encontrar a gente con estudios y que son ignorantes? ¿Esto es posible? Pues tendremos que hacer hincapié en la EDUCACIÓN así, con mayúsculas. Reflexionemos de forma crítica sobre lo que comunicamos cada día en nuestras aulas, sobre qué queremos conseguir...
Pues sí, con el deseo de que no nos recorten nada de nada en nuestras ilusiones, en nuestra profesionalidad, en nuestro afán de lucha, en nuestra rebeldía, en nuestros sueños, en nuestras fuerzas, en nuestro compromiso con la pública y su calidad, en nuestras aptitudes... QUE LA FUERZA NOS ACOMPAÑE . Sí, seguro que podremos sonreír, reflexionar, criticar, integrar, escuchar, observar, empatizar...
El autor aporta algunas reflexiones sobre los recortes y y la demonización de los funcionarios, al convertirlos en culpables de la crisis. Seguro que salvaremos al país con los recortes y los aumentos de jornada que ha decretado. La verdad es que como dijo en su día el señor Trillo: "MANDA GÜEVOS". Cuando nos aumentan la jornada a los funcionarios ¿ no querrán decir que trabajamos poco? Qué manera de faltarnos al respeto. ¡Es demasiado!
"Si la crisis es general, no es comprensible que se rebaje el sueldo sólo a los funcionarios y, si lo que se quiere es gravar a los que tienen un empleo, debería ser una medida general para todos los que perciben rentas por el trabajo sean de fuente pública o privada. Con todo, lo más sangrante no es el recorte económico en el salario del funcionario, sino el insulto personal a su dignidad. ........)
Interesante,
aunque largo artículo sobre el documento que presenta por sorpresa nuestro
queridísimo ministro WERT y sobre sus hipotéticas intenciones al presentarlo en
verano y disfrazarlo de una NO REAL PARTICIPACIÓN.Aunque largo, creo que merece
la pena leerlo y difundirlo: nos habla del currículo oculto de quien lo
escribe, la intención de privatizar y reducir a mera beneficiencia a la escuela
pública. TAMBIÉN SE FIJA EN AQUELLO DE LO QUE NO SE HABLA: “No se habla de desarrollo social, de progreso
igualitario, sino sólo de crecimiento económico, como si una sociedad con más
dinero fuese necesariamente una sociedad mejor. Por otra parte, fomenta, desde
esta declaración de intenciones, la competitividad en lugar de la cooperación,
el egoísmo en lugar de la solidaridad, el individualismo en lugar de la
colectividad”.
………………………………………
“Este
documento es el certificado de defunción de la movilidad social, del progreso
de la clase media, del desarrollo social, de la flexibilidad frente a la
uniformidad, del libre pensamiento frente a la fe en la vía única. Es la puesta
en marcha vía ley orgánica del caciquismo y el clientelismo en toda la
estructura social, la puerta abierta al mercadeo con la sociedad futura.”
Eso nos recuerda Luis Pastor en este videoclip. Gracias, gracias a todos por hacernos sentir y vivir la utopía. Quizás estemos ahora faltos de esos poetas y referentes. O quizás solo sea nostalgia que sentimos, no se. Como dice en su poema: Éramos tan libertarios, casi revolucionarios, ingenuos como valientes, barbilampiños sonrientes…